miércoles, 13 de abril de 2011

Otoplastia: orejas sin complejos

Aunque normalmente no nos fijemos en el aspecto de nuestras orejas lo cierto es que cualquier detalle fuera de lo normal en ellas llamará la atención de los que nos rodean y por supuesto de nosotros mismos. Pocos hechos pueden llegar a influir tanto en la personalidad de una persona como la forma y tamaño de sus orejas.
Esto es muy notorio en la infancia donde los compañeros de colegio suelen ser incluso crueles con los niños con orejas muy grandes o separadas.  

Por esto, lo ideal es operar las orejas muy separadas en la infancia. A partir de los 5 o 6 años las orejas  han terminado su desarrollo y  a esa edad  el cartílago que les da  forma es más facil de moldear, con lo cual los resultados serán mejores.
Pero de todas maneras si se llega a una edad adulta con unas orejas muy separadas, siempre se podrá realizar una otoplastia con muy buenos resultados, pero eso si, el paciente llevará muchos años con un complejo  que se pudo evitar a una edad temprana.

La cirugía de las orejas u otoplastia es una de las cirugías más agradecidas que existen, pues una vez operado el paciente podrá quitarse ese peso de encima que limitaba su desarrollo personal en incluso su peinado, pues en un intento por esconder las orejas suelen dejarse el pelo largo. 

Un detalle importante al planificar una otoplastia es que no se deben  generar falsas expectativas antes de la intervención, por ello será importante una buena comunicación entre paciente y cirujano. Una vez tomada la decisión existen muchas técnicas que tratan las orejas de soplillo o en pantalla,  pero lo importante es elegir la más adecuada en función de cada caso. A grandes rasgos te puedo decir que actualmente la otoplastia busca  recrear la forma natural de la oreja, moldeando el cartílago mediante suturas. En otros casos es necesario quitar cartílago que puede ser redundante y produce ese aspecto poco agradable. 

Sea el que sea tu caso hoy en día se consiguen resultados muy naturales sin cicatrices visibles y con una recuperación muy rápida. El procedimiento se puede realizar con anestesia local o anestesia general  en función de la edad o condición previa del paciente. El postoperatorio es cómodo y con un adecuado seguimiento la recuperación no debe tener ninguna complicación.

Como siempre será importante que elijas un cirujano con la cualificación adecuada en este tipo de cirugía pues como en toda cirugía plástica facial la probabilidad de complicaciones es mayor en manos de un cirujano poco formado. Sin duda el cirujano ideal para esto es el cirujano plástico facial que por su formación previa como otorrino domina el área de la oreja mejor que ningún otro especialista.
4b2174d5-0803-31ea-9149-5c908d740dc4